Todo ser humano merece y busca bienestar. Muchos logran sus metas materiales, mas no la paz y felicidad que mantiene alegre el espíritu, la plenitud de vivir en control total de sus emociones.
Y es que a lo largo de la vida se aprende a leer, tocar guitarra, manejar un vehículo o pintar un cuadro, pero nadie enseña a controlar las emociones negativas, como miedo, estrés, enojo, y a vivir la vida con alegría y entusiasmo.
Para ello deben aprender el “arte de vivir” sin costo alguno, basta con unos minutos de dedicación y concentración plena haciendo ejercicios de respiración.
Dedicando diariamente 20 minutos a una relajación eficaz mediante la respiración puede reducir los niveles de estrés, elevar el sistema inmunológico, aliviar la ansiedad, la depresión, aumentar su creatividad y claridad mental, además de equilibrar los patrones del sueño.
¿Cómo lograrlo?
Al despertar cada mañana, antes de levantarse, dedíquese ese tiempo de relajación mental, luego de estirar bien su cuerpo y sentarse en la cama.
Las técnicas de respiración hacen felices a las personas, asegura Carmen Julia Gómez Carrasco, terapista, investigadora social, presidenta de la fundación “El arte de vivir”, entidad que trabaja con el Concejo Económico y Social de las Naciones Unidas (Ecosoc), y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en programas orientados a mejorar la calidad de vida en áreas empobrecidas, educar la mente, las emociones, el espíritu, y brindar al ser humano la oportunidad de contar con un cuerpo sano libre de estrés.
“Desde antes de nacer vamos acumulando estrés, emociones negativas: ansiedad, ira, resentimientos, miedos, culpa, todas las situaciones y preocupaciones que vive la madre, sobre todo las adolescentes embarazadas. Los seres humanos heredamos todo: patrones mentales y la programación emocional de nuestros padres”, por eso es que los hijos, aun cuando no se hayan criado con sus padres, tienen comportamientos iguales a sus progenitores”, afirma Gómez Carrasco. La respiración es la principal fuente de energía, sostiene, y por medio a ella se puede cultivar ese estado de paz y serenidad. La terapista expresa que la mayoría de las personas no sabe respirar. Las emociones negativas se pueden liberar a través de una buena respiración, porque es lo que conecta al cuerpo con la mente, está totalmente vinculada a las emociones.
Con las técnicas de respiración “entramos energía al cuerpo”, y por eso podemos ser más eficientes y efectivos en la lucha cotidiana. Según Gómez Carrasco, la ira no sirve para nada. Es la mente serena y enfocada lo que te permite lograr todo. “A través de la respiración tú puedes entrar ese oxígeno, energía a tu cuerpo que es vital y, al mismo tiempo, eliminas toxinas emocionales que todos tenemos: miedo, culpa, ira, ansiedad, estrés, todo se va liberando a través de técnicas de respiración”, manifiesta.
Aconseja “limpiar diariamente el sistema nervioso”, practicando 20 minutos de técnicas de respiración alternada, la cual es muy efectiva.
“Cuando usted se levante, no se tire de la cama. Abra sus ojos lentamente, estire el cuerpo, si quiere, quédese sentado en la cama y practique sus ejercicios de respiración”, añade. Evite ejercicios de respiración con los pies cruzados; tensa el organismo y para la circulación.
TÉCNICAS PARA UNA BUENA RESPIRACIÓN
Para lograr una buena respiración, la terapista Carmen Julia Gómez Carrasco aconseja:
Siéntese con los músculos relajados, especialmente los hombros, fije la vista en la punta de la nariz, inhale profundamente y exhale lentamente su respiración durante 20 minutos.
Es importante reaprender a respirar, dice, ya que al inhalar se expande el abdomen y al exhalar el aire hundimos nuestro abdomen. Sugiere hacer 10 respiraciones profundas todos los días. Respirando de esa forma estamos estimulando al cuerpo a segregar las hormonas del bienestar: dopamina, serotonina, endorfina para mantenerse en salud; y al mismo tiempo nuestro cuerpo comienza a disminuir la segregación de las hormonas del estrés: cortisona y adrenalina.
La técnica de la respiración alternada que pacifica profundamente el sistema nervioso, y estimula la comunicación entre los dos hemisferio cerebrales consiste en colocar dos dedos en la frente, con la mano derecha colocar dos dedos de la mano: mayor e índice sobre la frente y con el dedo pulgar tapar el lado derecho de la fosa nasal, inhalamos profundamente por el lado izquierdo, y exhalamos por el lado derecho. Luego cambiar la posición de izquierda a derecha, tapando siempre una de las fosas nasales con el dedo pulgar.
La misión de la fundación El Arte de Vivir es mostrar, enseñar que se puede mantener la calma y la salud.
“Mi trabajo es enseñarles a esas personas que el arte de vivir mediante la práctica de estos ejercicios reduce el estres, mejora la eficiencia y productividad”, concluye la terapista.
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