Miles de soldados y policías, helicópteros, torpederas y un complejo sistema de inteligencia cuidarán al Papa en Río de Janeiro
Será el hombre más custodiado del mundo durante los siete días que permanecerá en Río de Janeiro. Los anillos de seguridad se comparan con los que fueron activados en marzo de 2011 durante la visita del presidente Barack Obama. Miles de soldados y policías serán desplegados para proteger la integridad y la vida del representante de Dios en la Tierra, el Papa Francisco.
La seguridad del papa argentino costará millones de dólares a pesar de los esfuerzos por vivir alejado de los lujos. Un reporte publicado por la Voz de América en su página digital da cuenta que el dispositivo de seguridad implementado por las autoridades brasileras para blindar las zonas de Río de Janeiro entre el 22 y el 28 de julio, fueron reforzadas con agentes y unidades de todas las Fuerzas Militares en prevención de desórdenes.
Se esperan protestas, agitación social durante la visita como las registradas en los días de la Copa Confederaciones, pero el gobierno de Dilma Rousseff asegura que el papa tienen la situación bajo control.
Cálculos del gobierno de Brasil y del Vaticano señalan que se espera que la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) congregue a por lo menos 1.5 millón de peregrinos de todo el mundo. El Vaticano asegura que no teme que las protestas, de registrarse, afecten el santo periplo.
"Es difícil prever alguna cosa. Pero no esperamos que suceda algo porque las reivindicaciones no están vinculadas a la visita del papa. Tienen que ver con nuestro gobierno. Por eso supongo que no habrá grandes problemas", dijo el arzobispo emérito de Sao Paulo, Claudio Hummes citado por la Voz de América.
Varios Obispos brasileros han hecho declaraciones a favor de las multitudinarias protestas que en junio pusieron en jaque al gobierno de Rousseff y lo obligaron a dar marcha atrás en una polémica medida que aumentó en unos centavos el precio del transporte público.
Según el plan activado por el Departamento de Defensa, las unidades militares que cuidarán al Papa se concentrarán en 10 áreas. Incluyen el control del espacio aéreo, la vigilancia de las fronteras, control de armas químicas y bacteriológicas, el comercio de explosivos y también de la defensa marítima y cibernética, entre otros.
El gobierno no reveló desde cuando fue activado el operativo de seguridad.
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