Los fuegos artificiales, velas, cables eléctricos, enchufes, hornos, estufas encendidas y bebidas alcohólicas son las principales fuentes de problemas en los días de fiestas de fin de año.
Durante la temporada navideña se registra un sinnúmero de accidentes, en especial con los más pequeños de la casa, pues al abandonar las aulas por las vacaciones de fin de año están expuestos al trajín propio de estas fechas.
“Ya que todos estamos en casa, de fiesta o de paseo, tenemos actividades agregadas a nuestra vida diaria que pueden, hasta cierto punto, ser perjudiciales y atentar hasta con nuestra vida, principalmente con la de los pequeños curiosos que llamamos hijos”.
Estadísticas
La Organización Mundial de la Salud define un accidente “como un acontecimiento no premeditado, cuyo resultado es el daño corporal identificable”, en el caso de los niños, el 50% de estos ocurre en el hogar, elevándose a un 80% en los primeros años de vida, donde la causa de mortalidad llega a alcanzar hasta un 19.37%.
Las principales causas de mortalidad por accidentes en niños menores de un año son: asfixia con objetos ingeridos, automóvil, ahogamiento y quemaduras por fuego, entre otros.
La mejor forma de prevenir estos problemas es tomar las medidas necesarias.
“La mayoría de nosotros tenemos una serie de elementos que debemos tomar en cuenta para evitar accidentes, como son los fuegos artificiales, velas, los cables eléctricos, enchufes o toma corriente, las bebidas alcohólicas, preparación y tipos de comida”.
También, están los hornos y estufas encendidas, cristalerías usadas para adornos navideños, candelabros, juguetes fabricados con material tóxico, juguetes de piezas pequeñas y hasta el descuido de los padres al estar en diversas actividades.
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